¿Es posible ser Feliz?



¿Cuántos libros, películas, filosofías, religiones, gurúes, y terapeutas han afirmado algo parecido a esta frase: “Todos tenemos la capacidad de ser felices, sin embargo no hemos querido darnos cuenta”, “el único que es capaz de hacer un cambio eres tú mismo”, “la felicidad esta dentro de nosotros”? Podría estar toda la noche mencionando todas y cada una de estas frases. y catalogarlas desde las más piratas, las más profundas, las más ridículas, las que provienen de algún tipo que se auto nombra Iluminado y con poderes de sanación, las frases trilladas que algunos están fastidiados de oir, las mejores, las que provienen de algún locutor de radio que pretende adoctrinar a su audiencia y así tener mayores seguidores. Ok, ok, no me enojaré!
La verdad es que hay que aceptar que todas estar personas que acabo de mencionar tienen buenas intenciones y que aunque haya un interés mundano detrás de su motivación, hay a quien le ha ayudado a sentirse “confortado” aunque sea por unos minutos! Por tal motivo lo agradezco.
¿A dónde va Clara esta vez? ¡Aja! A darte una noticia. Estoy de acuerdo con todos ellos y no solo eso, yo también estoy en esa lista. Jajajaja.
¿Y sabes por qué? Porque yo lo he experimentado en algún momento y la manera en que lo he vivido es a través de la Meditación.
Uf… ¿tanto para llegar a esto? Si, así me salió queridos amigos.
¿Qué es la meditación? Por el momento les puedo decir que es una manera segura de llegar a la “FELICIDAD GENUINA INSTANTE A INSTANTE”.
Hace aproximadamente 6 años que descubrí esta hermosa y curativa herramienta. Y me di cuenta para empezar que si me volvía una practicante constante ya no necesitaría de otros para que me dijeran cómo hacer para dejar de sufrir, YO LO DESCUBRIRÍA, día tras día.
Meditar una hora al día me ha hecho una “mejor persona”, y me refiero con esto a:

  • Dejar de pensar solo en mi y preocuparme más por los seres que están a mi alrededor
  • Un poco más paciente (solo un poco, y créanme para algunos que están a mi alrededor es un gran paso)
  • Tener disciplina
  • Alguien que se enferma poco
  • No necesitar tantos objetos para ser feliz (celular, zapatos, bolsas, automóvil, títulos, etc.)

La gente a menudo me pregunta "¿qué es ? ¿cómo se hace?". Permítanme contestar a estas preguntas con un ejemplo:
Estoy en Starbucks, mientras escribo, estamos en verano. De pronto observo detenidamente una librería que esta frente de mí en la cual hay un jardín hermoso. Entro en el jardín con la cabeza llena de ideas, escribiendo mentalmente este artículo, pero el paisaje es demasiado bello para ignorarlo. Existen todo tipo de plantas multicolores, el aire es rico en aromas y el sol de la tarde brilla sobre la blanca corteza de los árboles.
Enseguida me encuentro examinando un arbusto todo florecido. Algunas flores están completamente abiertas, otras están semicerradas. También hay flores marchitas que se están secando, pero todas son perfectas. Una hormiga recorre el tallo de una flor y los hilos de seda de una telaraña rota apenas se mueven en el aire. Las ideas y preocupaciones con las que entré al parque han desaparecido. Me encuentro en un tiempo y un espacio diferentes.
Esto es la meditación, un estado en el que el cuerpo está relajado, la mente está tranquila y vivimos las sensaciones del momento.
Todos conocemos momentos así, porque suceden todos los días. A todos nos pasa cuando las condiciones son adecuadas: tal vez cuando estamos acariciando a nuestro perro, o escuchando música, o disfrutando de una taza de café.
Sin embargo, cuando las condiciones no son las adecuadas, podemos atravesar el parque sin tener conciencia de otra cosa que no sean nuestras ideas, preocupaciones y obsesiones. Esos tranquilos momentos no siempre aparecen con facilidad; lo más frecuente es que lo hagan cuando algo nos llama la atención. Es en esos momentos la mente está concentrada y no va de una cosa a la otra. Concentrar la mente es el secreto de la meditación.
Continuará…

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